¡Qué mejor forma de aprender francés que escribir con tiza en el patio en vez de en una libreta! Mucho más divertido para los alumnos, que repiten los verbos sin rechistar! Además su pronunciación está mejorando mucho con Mlle Gema, hasta que la profesora del colegio de Paula les ha felicitado por su pronunciación de la «r» francesa, muy dificil para los extranjeros.